Audiolibro Todos los detectives se llaman Flanagan

En su segunda novela, Flanagan descubrirá el aterrador comercio de niños. En una clínica, un doctor y una entidad sin escrúpulos consiguen niños de varias zonas pobres para luego vendérselos a familias adineradas, una situación que se ve repetida hoy en día (con los menores víctimas de tráfico de seres humanos adultos que han hecho denuncias pertinentes). Esto lleva al protagonista, que pertenece a un territorio con muy bajos ingresos, a familiarizarse con los ámbitos de la clase alta y ver cual es el dilema que lo descorazona, entre Carmen, la gitanilla traviesa y desenfadada, y Nines, la niña acomodada y refinada.